La estrategia global de Betano y su mirada puesta en el fútbol argentino
Detrás de este movimiento hay una visión estratégica clara por parte de Betano. La compañía, que forma parte del grupo Kaizen Gaming, ha venido expandiéndose a gran velocidad en mercados clave de Europa y América Latina, posicionándose como una de las marcas con mayor proyección en el universo del iGaming.
Patrocinar clubes con fuerte impacto local y regional ha sido una de las claves de su estrategia de visibilidad. Equipos como Olympiakos, Sporting de Lisboa, Benfica y Aston Villa ya llevan su nombre en sus camisetas. Además, Betano también está presente como sponsor oficial de torneos de prestigio como la UEFA Europa League y ligas nacionales como el Brasileirão y la Liga Profesional de Fútbol de Argentina.
El club de Núñez no solo tiene una historia rica y un presente competitivo, sino que también cuenta con una base de hinchas numerosa y muy activa, tanto en Argentina como en el resto de América. Esto convierte a la camiseta riverplatense en un espacio de altísima visibilidad.
Más que un logo: tecnología, innovación y experiencia de usuario
Betano no se limita a ser una simple casa de apuestas. En los últimos años, ha trabajado para posicionarse como una plataforma de entretenimiento digital integral. Su oferta abarca desde apuestas deportivas en tiempo real y juegos de casino en vivo, hasta funciones interactivas que mejoran la experiencia del usuario. Además, promueve el juego responsable mediante herramientas específicas que ayudan a los jugadores a mantener el control sobre su actividad.
La posible alianza con River Plate no solo reforzaría su presencia en Argentina, sino que también consolidaría su imagen como una empresa que apuesta por asociaciones sólidas y duraderas con marcas deportivas de gran prestigio.
Una tendencia que crece en el deporte profesional
La vinculación entre clubes de fútbol y casas de apuestas es una tendencia en ascenso en muchas ligas del mundo. Estos acuerdos suelen traducirse en ingresos importantes para las instituciones deportivas, que los destinan al desarrollo de infraestructura, contrataciones o programas sociales. A su vez, las empresas del sector logran posicionarse en un entorno altamente competitivo, donde la visibilidad y la confianza del público lo son todo.