La UTSAJU argumentó que la situación de salud es "opuesta" a la de hace dos meses y que el uso de mascarillas era obligatorio como en otros lugares cerrados como hoteles y gimnasios.
Las evidencias aportadas por la Consejería de Sanidad de la Generalitat valenciana hablaban de las dificultades de mantener el distanciamiento social en los locales de juego y que estaban muy cerrados y mal ventilados en algunos casos.
La presentación de Valencia también mencionó los temores de una "cuarta ola" de COVID-19 y preocupaciones sobre la eficacia de la vacuna contra cepas más virulentas como las de Gran Bretaña y Brasil.