¿Pueden los casinos variar el RTP de los juegos?
No, no pueden. Lo que sí pueden hacer es elegir en primera instancia juegos diseñados con un RTP más bajo, o decantarse por gamas de juegos con preajustes de RTP seleccionables. Esto último no es algo nuevo: algunos de los principales proveedores del mercado (como por ejemplo Novomatic, NetEnt, Thunderkirck, Microgaming o Quickspin) ofrecen este tipo de series de juegos a los operadores para que sean ellos los que decidan el RTP de sus máquinas y slots online, dentro de unos límites.
En una entrevista reciente Magnus Olsson de Play’n Go explicó cómo funciona el proceso:
“Certificamos todos nuestros juegos (salvo los video bingos, que siempre tienen un RTP 96% debido a sus particularidades matemáticas), para 5 niveles diferentes de RTP:
- 96% RTP
- 94% RTP
- 91% RTP
- 87% RTP
- 84% RTP
Y además, algunos juegos se certifican con 98% RTP en jurisdicciones específicas. Aunque el RTP puede variar ligeramente, tratamos de que nunca baje de estas cinco cifras.”
Por ejemplo en el caso de su recién estrenada tragaperras Holiday Spirits, los niveles de RTP están marcados en el 96,29, 94,22, 91,21, 87,26 y 84,25. El desarrollador debe certificar el RTP en todos los niveles disponibles, contratando para ello servicios profesionales de laboratorios independientes.
¿Qué proveedores diseñan sus juegos con un único RTP?
Hay muchos proveedores que no ofrecen un RTP a la carta a los casinos. Sus juegos salen al mercado con una única opción de RTP, así que no importa en qué casino juegues, porque el RTP será siempre el mismo. Por el momento entre las grandes marcas que siguen la política del RTP único están Yggdrasil, ELK, Relax Gaming, BTG y Blueprint. Pero hay muchas más.
¿Las tragaperras cambian su RTP con el tiempo?
Existe la idea generalizada de que las slots se lanzan con un RTP más favorable al jugador, y a medida que pasa el tiempo este porcentaje va bajando en favor de la banca del casino. Se trata de un bulo completamente falso.
Hacer esto no solo sería ilegal, sino que repercutiría muy negativamente en la fiabilidad del casino y la marca del juego. Los operadores no tienen las herramientas para hacer esto, y cualquier desarrollador que permitiese algo así en el mercado actual se vería seriamente desprestigiado.